Los resfriados de verano son el mal más temido en esta época. Afectan a nuestra garganta, nuestro oído y es difícil combatirlos por los frecuentes cambios de temperatura a los que estamos expuestos. De hecho, el 20% de resfriados se producen en esta época, y gran parte de ese porcentaje se debe a un mal uso del aire acondicionado.
Por eso hoy os damos algunos consejos para que evitéis un catarro veraniego:
- La temperatura del aire acondicionado debe oscilar entre los 23º y los 26º. Son los grados adecuados para la salud pero también para el medio ambiente. Llegad a un consenso con vuestros compañeros de trabajo o en casa para mantener siempre esa temperatura.
- Evita cambios bruscos de temperatura: aunque a veces son inevitables, si pasas de la calle a una estancia con aire acondicionado, cúbrete el cuello y la boca para que el cambio no sea tan perceptible.
- Si aún así la temperatura es demasiado baja, mantén el cuello cubierto o ponte una chaqueta.
- No fuerces la voz y si te notas la garganta seca, bebe líquidos más a menudo. El aire acondicionado reseca mucho el ambiente y, en consecuencia, también la garganta.
- Mantén una alimentación sana y equilibrada. Recuerda: «An apple a day keeps the doctor away» (una manzana al día mantiene al médico bien lejos).
Aunque parecen consejos básicos, son los que nos ayudarán a pasar un verano sanos y fuertes.