Puede ser que alguno de tus hijos sufra algún tipo de problema auditivo que  haya desencadenado en una pérdida auditiva y requiera del uso de los audífonos. Por lo general, es frecuente que los niños sientan rechazo ante estos dispositivos. En el post de hoy, te queremos dar una serie de consejos para conseguir que tu hijo se familiarice con sus audífonos y deje de verlos como algo negativo.

 

¿Cómo reaccionan los niños al tener que llevar audífonos?

 

Como mencionábamos anteriormente, es bastante frecuente que los niños vean a los audífonos como algo negativo y por tanto, eviten ponérselos siempre que puedan. Es común encontrarse casos en los que los niños se quitan los audífonos siempre que no están en presencia de sus padres, por ejemplo cuando salen de casa para ir al colegio o cuando salen a la calle con sus amigos. El objetivo principal es conseguir que tu hijo no vea a los audífonos como un problema sino como una solución.

 

Uno de los consejos que más suele funcionar en el primer periodo de adaptación a los audífonos es negociar con tu hijo un periodo de descanso en el que pueda estar en casa sin ellos. Además, se puede crear una pequeña competición en la que se apunten las horas de cada día en las que tiene el audífono puesto, esto le animará a superarse cada día. De esta forma si incentivamos a nuestro hijo con algún tipo de recompensa cada vez que “supere su propio récord” conseguiremos que poco a poco se acostumbre a sus nuevos audífonos.

 

También es de gran importancia que familiares y amigos expresen fascinación por el audífono de tu hijo, de esta forma podrá ver que el audífono no es tan negativo como él piensa. Tan importante como esto es conseguir darle normalidad al hecho de que nuestro hijo tenga un audífono y que no se ejerza sobre él un trato diferente.

 

Además de todo esto, es importante realizar una correcta adaptación a los sonidos para que su hijo no se sienta incómodo con ellos. Por ejemplo, evite situaciones con mucho ruido o con aglomeraciones de gente, o lugares o situaciones donde puedan existir gran variedad de sonidos y a distintos volúmenes hasta que tu hijo esté completamente adaptado a su audífono y a su funcionamiento.

 

Otro de los aspectos que consideramos fundamental, es otorgarle un grado de responsabilidad sobre sus audífonos acorde a su edad. Con esto se pretende evitar que tu hijo se sienta diferente y dependiente de una tercera persona. En un primer momento puede encargarse del cambio de las pilas y posteriormente, hasta de la limpieza del audífono. También debe participar en la elección de su audífono, dejemos que sea él, junto con el audioprotesista, el que elija el diseño y los colores. Cuanto más le guste, más fácil será su adaptación.

 

Cuando tenga que ir al especialista, a medida que se vaya haciendo mayor, deje que sea su hijo el que interactúe con el audioprotesista. Nadie mejor que él para expresar sus sensaciones con el audífono. Además generará un clima de confianza que le facilitará también su adaptación.

 

Sabemos que es un proceso largo y complicado, en el que es normal que su hijo pase por momentos malos y buenos. Por ello es importante que sus padres sean compresivos y conscientes de que se trata de una carrera de fondo. Es importante ser paciente, y no pretender que tu hijo se adapte al audífono de la noche a la mañana.

 

Si tienes alguna duda sobre alguna de estas recomendaciones, o necesitas algún tipo de producto para el mantenimiento de tu audífono, no dudes en ponerte en contacto con nosotros. Recuerda que nos puedes encontrar en cualquiera de nuestros centros Oír Vital en Santa Cruz de Tenerife (C/San Clemente, 16), San Cristobal de La Laguna (C/Tabares de Cala, 16) y en Las Palmas de Gran Canaria (C/Perdomo, 12). Recuerda también que puedes visitar nuestra pagina web oirvitalcanarias.com